MLS: lecciones para tener un Juego de Estrellas
El Soldier Field de Chicago está listo para la fiesta del futbol estadounidense: la MLS All-Star Week y la noticia de los días previos es que Cristiano Ronaldo no será parte de la plantilla del Real Madrid que enfrentará al equipo armado por los mejores jugadores de la Major League Soccer.
El resto del equipo campeón de la Champions League enfrentará a los elegidos por la afición, entre los que se encuentran los grandes nombres que han vestido a la Major League Soccer en tiempo recientes: Bastian Schweinsteiger, Andrea Pirlo, David Villa, Sebastian Giovinco; complementados con la selección del técnico del Chicago Fire designado para el compromiso, Veljko Paunović.
El partido que disputarán este miércoles es la última cita de un verano en el que Estados Unidos se ha adueñado del futbol. Los invitados de lujo para disputar partidos de calentamiento en sus estadios han servido de preámbulo para la semana que promociona su liga. Estados Unidos sabe cómo hacer del deporte un espectáculo y trabaja en conquistar a su gente con el rodar del balón, todavía lejos de ser prioridad entre los aficionados.
El pasado miércoles, 280,735 personas disfrutaron en cuatro diferentes puntos: Barcelona vs Manchester United, PSG vs Juventus, Manchester City vs Real Madrid y la final de la Copa Oro entre Jamaica y Estados Unidos. Las cifras sorprendieron a la prensa local.
Este año, consiguieron además que El Clásico se disputará fuera de España por primera vez desde 1982 y tanto el espectáculo deportivo como la asistencia apuntan al éxito de su organización.
Antes de volver a la normalidad, el MLS All-Stars Game debe cumplir con las expectativas planteadas por la presencia del club más ganador del futbol europeo y un estadio para 60 mil personas es un gran reto.
Este año, los boletos más baratos se vendían en 45 dólares, una cifra baja en comparación con otras ediciones y eso responde a la capacidad del recinto, los más costosos son paquetes VIP con pases a entrenamientos abiertos, fiestas exclusivas, comida y bebidas, cuyos precios van de los 450 a los 800 dólares.
En organización de eventos deportivos, los estadounidenses tienen la mejor reputación porque sus esfuerzos se enfocan en hacer que los aficionados vivan la experiencia completa, incluso si el deporte está en segundo plano para los asistentes. El concierto gratuito que abre la semana de celebración está encabezado por la banda neoyorquina X Ambassadors, pero el tópico musical no termina ahí, el sitio de la MLS ha presentado un playlist elaborado por Greg Garza en colaboración con sus compañeros del XI elegido por los aficionados.
Desde 2012, La Major League Soccer ha hecho crecer en un 20% el interés en el futbol, de acuerdo con un dato que Repucom presentó a propósito de la Copa América del Centenario; pero su liga todavía es considerada en crecimiento y la competencia con el torneo vecino, la Liga Mx es todavía dispar.
La prueba está en el dominio mexicano de las últimas 13 ediciones de la Concachampions, en donde sus clubes han alcanzado instancias finales solo para ser derrotados por el rival de siempre, ¿pero tiene algo que aprender del nivel de espectáculo que ofrecen?
En tiempos recientes, varios clubes mexicanos han invertido en construir nuevos estadios, como lo hicieron Chivas, Monterrey y Santos, o en remodelar sus instalaciones, como hizo Toluca con la Bombonera y América con el Azteca. Los aficionados han agradecido las comodidades, pero la quejas sobre la experiencia que viven en algunos recintos todavía no puede traducirse en satisfacción total y con excepción de Rayados, Tigres y Xolos, los llenos se reservan para las ocasiones especiales; los aficionados se quejan por la relación entre precio y espectáculo.
Este verano, el futbol mexicano también intentó hacer un éxito de sus eventos futbolísticos de pretemporada. El plan fue de Tecate con cuatro clubes mexicanos y dos europeos: Monterrey y Tigres vs Juventus, Chivas y Cruz Azul vs Porto. Los primeros sabemos que fueron cancelados por cuestiones de agenda del equipo italiano, sin embargo, los boletos todavía no se agotaban a pocos días de llevarse a cabo y los precios fueron el motivo.
Los otros dos encuentros ocurrieron entre tribunas casi vacías; en el Omnilife y el Estadio Azul no hubo más de 10 mil espectadores en cada noche; de nuevo, el costo, de 740 a 2,500, fue reclamado con la ausencia. Ninguno de los partidos fue memorable en la cancha.
Toluca recibió al Atlético de Madrid, como parte de su celebración del Centenario, el festejo se anunció con un par de meses de anticipación y se esperaba que los boletos “volaran” en pocas horas; pero la estrategia falló, ni siquiera el anuncio del viaje de la plantilla titular a México animó para agotar las entradas que hasta pocos minutos antes de partido estaban disponibles. Los precios fueron de los 500 a los 3 mil pesos en la zona VID, detrás de las bancas, y el lleno no ocurrió. El partido dejó muy poco para el recuerdo, a pesar del gran esfuerzo por hacer de la noche una fiesta.
Los eventos futbolísticos en México no suelen estar acompañados por shows musicales o fiestas con DJ, a diferencia de Estados Unidos, en donde los grandes eventos son precedidos por ceremonias al estilo del Super Bowl, siempre utilizado como parámetro de satisfacción. Esta liga no tiene a las leyendas europeas que la MLS ha pagado por unir a sus clubes. El consumo es distinto y al menos los recientes intentos de clubes de la Liga Mx indican que el aficionado pone en una balanza el costo y el beneficio de adquirir un boleto a un precio tan elevado. La estrategia para convencerlos no ha tenido como garantía las mejores exhibiciones en la cancha.
